Hasta pronto...

Saldré a recorrer el Legendario Mayab.

A escuchar el canto de la torcaza y el ruiseñor.

A encontrarme con el espíritu de los Siete Guerreros en la quietud e inmensidad de la noche.

Al sentir el aroma de los lotos en los cenotes, pensaré en el amor de Nikté –Ha y Chacdziedzib.

Les dejo un rico Xtabentún, un dulce licor de miel y anís, que abejas mayas toman del néctar de Xahiles (flores azules) que crecen enredadas a las piedras, para acompañar la espera.

Se acostumbra servir solo, con hielo, o simplemente frío.

Se toma en una copa pequeña y no olvides ponerle en el fondo un granito de café.

Al paladearlo, espero recuerden a la Xkeban y a Utz-Colel , las dos mujeres de la Leyenda de la Xtabay, (Mujer Seductora)…

Y no es necesario tomar grandes cantidades, con apenas un traguito se tiene la sensación de estar embriagado por el amor de esta tierra de duendes, de cenotes, de guitarras y de piedras.

Estaré de regreso en la próxima Luna, la del Ooch, la que gobierna y protege a los que cumplimos años en abril, no se la pierdan.

Hasta entonces, un abrazo y beso, y una canción a ritmo de bolero yucateco; deléitense con sus guitarras.

Con dedicatoria especial para Ti ...

DUDA

Yo no sé lo que siento que al mirarte,

tiemblo y dudo pensando que te quiero,

pues no sé, si es que vivo para amarte,

o si es por adorarte que me muero.

Yo no sé lo que siento que al mirarte,

tiemblo y dudo pensando que te quiero,

pues no sé, si es que vivo para amarte,

o si es por adorarte que me muero.

Tu boca es una flor, es una herida,

y no sé, si en tus labios escarlata,

bebo la esencia que me da la vida,

o el pérfido veneno que me mata.

Tu boca es una flor, es una herida,

y no sé, si en tus labios escarlata,

bebo la esencia que me da la vida,

o el pérfido veneno que me mata...